Por Álvaro Ortiz
CHETUMAL, 13 de marzo.- Durante cuatro semanas en los meses de febrero y marzo, el ilustrador y tatuador colombiano, Farid Hadechini, así como el documentalista y artista visual, Santiago Martínez Caicedo, también del país sudamericano, captaron la esencia de la belleza botánica del Centro y Sur de Quintana Roo a través de una serie de ilustraciones y una exposición llena de magia y cercanía a la cultura maya que fueron presentadas en las instalaciones de un hotel en el municipio de Othón P. Blanco.
Mejor conocido por su talento como tatuador de una sola aguja, Farid Hadechini estuvo en contacto con la belleza de la selva quintanarroense y es de la vegetación de esta región de la Península de Yucatán de donde tomó la inspiración para sus ilustraciones.
Durante su estancia en esta zona, el artista colombiano que diseña ilustraciones que adornan el cuerpo con gestos minimalistas, compartió sus conocimientos y habilidades a través de talleres de arte y sesiones privadas de tatuajes.
Su propuesta para la residencia de creación fue inspirarse en la botánica de la Península de Yucatán y construir una ecología imaginada e impermanente que mezcló con la de su país de origen, generando sus obras más recientes a la sombra, clima, y vegetación del municipio Othón P. Blanco y la laguna de Xul Ha.
Acompañando la residencia, el artista visual Santiago Martínez Caicedo, se encargó de traducir al lenguaje audiovisual, el recorrido artístico realizado en la región quintanarroense. A través de una serie de entrevistas en maya a miembros de una familia, el artista visual capturó algunas de las historias mágicas de la región y las hiló con el trabajo plástico de su compañero.
La exposición estuvo instalada durante unos días en un hotel y las piezas en video que la acompañan estarán disponibles en las cuentas de Instagram de los artistas, @marnegro y @aparatogolgi.
